domingo, 7 de mayo de 2017

Audios, Educación y Confusiones

Una de las consecuencias del uso de medios digitales para la educación de los canarios timbrados es la distribución indiscriminada de audios, motivado principalmente por la naturalidad con que esto se hace con cualquier tipo de material digital y porque la mayor parte de los distribuyen no son los creadores del material que distribuyen por lo que no hay sentimiento de culpa alguna, todo lo contrario, para ellos todo está plenamente justificado, en algunos casos con la excusa de ayudar a los demás. Lejos estoy de querer adentrarme en este escabroso tema para evitar herir susceptibilidades innecesariamente, y por ello hasta aquí lo dejo como introducción. 

Este fácil acceso a muchos audios o giros por parte de una gran base de los aficionados por un lado ha ocasionado que muchos aficionados, en especial los que comiencen los usen sin realmente entender a cabalidad que están usando como modelo de educación para sus canarios.

Estoy de acuerdo en proporcionar una base para el comienzo, para incentivar el crecimiento de la afición y un nivel mínimo de competitividad, y con este propósito en este mismo blog se facilita la descarga de dos audios, pero esto es muy diferente a la distribución indiscriminada y masiva de todo material que se obtenga de cualquier fuente. Esta base debe ser trabajada con la orientación que cada aficionado le quiera dar.

Irónicamente, un buen audio, en combinación con una buena genética (i.e. canarios seleccionados por capacidad para el aprendizaje), puede lograr que algún aficionado se haga de algunos premios sin siquiera conocer el código de canto (que no consiste únicamente, de paso en identificar todos los giros).

Por un lado, encontraremos aficionados satisfechos con los resultados obtenidos y por otro lado otros frustrados por las puntuaciones alcanzadas por sus ejemplares, algunos aun rascándose la cabeza para explicarse el motivo.



Un buen audio es el punto de partida y en ese sentido debe estar correctamente adaptado a la capacidad de aprendizaje de sus ejemplares, para hacerlo más patente, un audio que puede funcionar a las mil maravillas en un aviario puede hacerlo mediocremente en otros o peor aún causar estragos. Una de las maneras de garantizar la adaptabilidad es la selección de los ejemplares por su capacidad de aprendizaje tratando en la medida de lo posible, claro está, de no cambiar radicalmente la estructura del audio y minimizar la variabilidad de los giros que lo componen. La impaciencia y la desesperación por obtener premios ocasiona los cambios radicales en el audio, aún si entender sus consecuencias, y la introducción de ejemplares a diestra y siniestra que logren el pelotazo al año siguiente. Me reservo la opinión sobre esta manera de proceder, la inmediatez y el facilismo predominan sobre las virtudes principales de los canaricultores; la paciencia y el trabajo. Los premios deben ser una consecuencia del trabajo y no el producto de un atajo al producto final, y que, obtenido de esta forma, es de naturaleza efímera y volátil.

Desafortunadamente, la comercialización de ejemplares está asociada al resultado en los concursos y ya sabéis el resto de la historia. Todos tenemos que vender o regalar ejemplares al final de cada temporada por un tema de capacidad de manejo, pero una cosa muy distinta es esa, en contraposición a la necesidad imperiosa de lograr una planilla decente o un premio para lograr un mejor precio de venta.


Difícil es competir en alguna disciplina sin comprender a cabalidad el reglamento que la regula, es como jugar al fútbol solo dándole patadas al balón con el objetivo de meterlo en la meta contraria, sí, ese es el principio básico, pero para poder jugar correctamente debes saber que es un “fuera de juego”, un penalti o una mano.
Igual sucede con todo y la canaricultura de canto no es la excepción, si no se conoce el código de canto se cometen errores, algunos en términos de composición otros en términos de estructura e interpretación.

Uno de los errores más comunes, sobre todo para aquellos que comienzan es la confusión entre giros y cito los más comunes:

1.-Confundir floreos lentos con floreos, siendo los primeros de naturaleza discontinua y los primeros semi-continua. Es el ritmo de emisión el que los diferencia. Los audios suelen estar más orientados a Floreos lentos que a Floreos, y el aficionado tiende erróneamente a pensar que una buena calificación en Floreos Lentos genera una equivalente en Floreos.

2.- Floreos Lentos con Cascabel: el sonido del cascabel debe apreciarse claramente, el del Floreo suele ser el esfuerzo de tratar de imitar una nota que es un poco “antipática” para algunos aficionados ya que suele degenerarse fácilmente con el celo y está muy correlacionada con el timbre metálico siendo la excepción aquellos ejemplares que poseen cascabel y no timbre metálico. Por otro lado, la posición de pico y su movimiento en la emisión del Cascabel son una ayuda visual infalible.

3.-  Hay ejecuciones deficientes, buenas y muy buenas: el hecho que un ejemplar ejecute un giro no significa que tiene una puntuación de forma automática, hay que evaluar COMO lo ejecuta, hay cloqueos francamente malos, otros buenos y otros muy buenos, es por ello que hay una escala para calificar cada giro, esto pareciera ser ignorado por algunos aficionados. La dicción es muy importante para la evaluación del giro, al igual cuando una persona habla no es lo mismo que pronuncie una palabra de la forma debida o que la acorte incorrectamente, ciertamente entenderemos lo que dijo, aunque no lo dijera correctamente, pero no por ello podemos darle la misma valoración.

4.- El audio es la plantilla, una plantilla deficiente limitará los resultados:  Si el audio contiene defectos, es muy posible que los ejemplares que aprendan de él también lo tengan. De igual manera si el audio solo contiene ciertos giros, es muy probable que los giros de nuestros ejemplares se circunscriban a ellos, si éste es su única fuente de aprendizaje.

Otras virtudes necesarias y deseadas, dependen más de las capacidades genéticas de los ejemplares que de su disposición en el audio objetivo, todos aquellos criadores que tienen ya educando con audio saben de sobra que cada ejemplar interpreta y ejecuta a su manera el material de aprendizaje y uno de los aspectos que más se valoran es la calidad de los enlaces. Un enlace mal acoplado entre dos giros disimiles pueden generar una falta a la hora de la ejecución. La capacidad de improvisación es también una característica notoria de los buenos ejemplares, i.e. comenzar la ejecución del repertorio de una manera distinta en cada ocasión como suelen hacer algunos ejemplares.


Desafortunadamente para los detractores de los sistemas de educación los ejemplares educados NO SON IGUALES, todo lo contrario, existen muchas diferencias entre cada ejemplar como bien sabemos los que usamos esta metodología. Ahora bien, no desaprovechemos la oportunidad de imprimir nuestro toque personal y distintivo a nuestro audio objetivo, porque, ¿Qué mérito tiene usar el trabajo de otro? Ninguno.